martes, 26 de octubre de 2010

El bunker de los artistoides

El otro día, en una muestra fotográfica, de afamado artista contemporáneo, mentábamos con una amiga esta nueva manía, no tan nueva, de los llamados por nosotros como "artistoides".
El "artistoide" se caracteriza por vestirse bien, o al menos hacerte pensar eso, que es en definitiva lo que importa.
El "artie" tiene una pasión por la ropa y la moda que se hace notar en sus chalequitos, chupines, sacos, botas, borceguíes y zapatos.
El "artie" tiene onda o muere en el intento.
El "artie" a veces luce un look un tanto andrógino, sobre todo esto lo vemos en la mujeres, muchos hombres temen ser tratados de maracas aún por las calles.
El pelo corto en la mujeres, estilo carré o aún mas corto, es un clásico, así como los anteojos wayfarer en el hombre.
El "artie" por lo general es cerrado, se cierra sobre si mismo y sobre su estilo. Es muy difícil ver a un "artie" saliendo con alguien que no lo sea, alguien "sin onda".
Además todo reside en mostrarse como seres superados, sobre todo claramente en lo que refiere al arte. Desde saber de música (lo mas independiente y poco conocida que haya), pasando por cine (si es hugandés o de Andorra mejor), hasta las artes en general como pintura, literatura, escultura, etc, etc.
Los "arties" entonces hacen de la imagen el escudo para mostrarse como gente inteligente y "cool", y lo logran la mayoría de las veces.
El problema es cuando uno habla con ellos y se da cuenta que, o no saben un carajo de nada, o al menos no tanto como su aspecto físico aparentaba.
En fin, quizás por eso sean cerrados y no tan abiertos a la conversaciones con los demás, ya que eso pondría en evidencia muchas cosas, sobre todo su inautenticidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cállate artistoide!