viernes, 18 de enero de 2013

Quiero re truco!!


La verdad es que nunca me interesó el juego de cartas. Ni siquiera los juegos simples. De chico me parecían una pérdida de tiempo. Miraba hacia fuera y veía un mundo. No entendía como la gente se podía encerrar a jugar con cartas.
Reconozco que en días de lluvia o noches frías de invierno se podría justificar mas. Pero bueno, para mi siempre fue la última opción. Prefería charlar, hacer música, o de última hacer otro tipo de juego. Las cartas las veía como entretenimiento de viejo. O de gente con alma de viejo, que vendría a ser lo mismo.
Todo esto deriva del asunto no menos importante de que nunca aprendí a jugar al truco. Por un lado nunca me interesó, como el resto de los juegos de cartas. La diferencia es que el resto, y con esto incluyo al mismísimo poker, los aprendí ante la insistencia de que aprendiera algo a fin de no quedarme fuera. Y claro, no me resultaron tan difíciles.
Pero el Truco es otra historia. Las veces que intenté jugarlo no terminé de agarrarle la mano. No entendía una goma de que iba. Me pareció siempre muy rebuscado. Con mil historias al pedo. Lo terminé odiando y pareciendo la pérdida de tiempo mejor elaborada de la historia de los juegos de mesa y cartas en particular.
Dicen que es el juego de mesa por excelencia de la Argentina. El juego mas característico de la "viveza criolla" y que si no lo sabes jugar, mas o menos que sos un apátrida y extranjero.
Cuenta la leyenda que los gauchos lo inventaron para no tener que pelear a faconazos en los días de lluvia o de invierno. Otros dicen que surgió en un duelo ante la falta de armas. Otros, como Sarmiento, tienen la teoría de nació como un modo de saldar las cuentas entre los criollos para ocultar la cobardía de los mismos.
No se cual es la verdad, de todos modos me resulta mas entretenido esbozar teorías al respecto que el juego en sí. Chau!

viernes, 11 de enero de 2013

Mi viejo rincón... de armas

En el mas alejado rincón de mi cuarto, yacen enfundadas mis viejas guitarras.
Como espadas en tiempos de paz, están guardadas, olvidadas, cubiertas de polvo.
La vieja felonía de lo impertérrito, de lo agónico, de aquello que se convirtió en lastre, mora en la esquina mas olvidada de mi habitación.
Nadie las viene a buscar, sola ahí se queda mi Excalibur del rock, mi espada de fuego contra los reaccionarios, sola y triste. Esperando la vuelta de los tiempos de combate nuevamente. La llegada de los viejos buenos tiempos que nunca volverán. De los añorados, años dorados. De las épocas de poder eléctrico, como una sauna de lava destructor de fascistas e infames.

Ahora las miro. Miro mis dos guitarras eléctricas y las veo como ametralladoras de rock, veo mi averiada guitarra acústica como un bufoso sin tambor, miro mi guitarra criolla de viajero como un noble cuchillo de campero, miro mi pandereta, mis bongos, mi charango, mi ukelele, mi cencerro, mis armónicas y mi teclado. Los miro a todos ellos y me doy cuenta que son mis armas pacíficas contra la ignominia, contra el destierro, contra la reacción.
Las miro y pienso... como será que se usaban.
Las miro y pienso... que quizás no falte tanto para que las vuelva a blandir.
Los tiempos cambian. Los malos se avecinan.

jueves, 10 de enero de 2013

Un día como hoy


Un día como hoy, recuerdo viejas películas de la infancia, de mi infancia alegre y feliz. Me acuerdo de muchas, pero sobre todo recuerdo las de Steve Martin y las de Eddie Murphy.
Me entero que ahora en Australia le van a cambiar el nombre a Mc Donald's por "Macca's", que es como le dicen los lugareños desde hace muchos años. Mas de 40 años que la marca de los arcos dorados esta en la isla roja de Oceanía.
Pienso y en Argentina solo esta hace poco mas de 20 años. Quizás haya que esperar otros veinte años mas, para que podamos cambiarle el nombre a la marca. Sin embargo no se bien como llaman a Mc Donald's mis compatriotas. Creo que cada uno tiene un nombre diferente para llamarlo. Otros menos originales lo llaman simplemente por el nombre conocido.
Yo siempre, o casi siempre, le llamé Mc Dowell's, como en la película de Eddie Murphy, "Un principe en NY". Creo que ese debería ser el nombre en Argentina para Mc Dowell's, o no se, "Antro de comida chatarra", "Tugurio del mal", "Despacho de bebidas y comidas rápidas", etc...
Me gustaba el negro, dueño de local en la película. Él decía que Mc Donald's le había robado todo. Una especie de Quijote payasesco de la comida chatarra. Con mucho orgullo decía... "Ellos tienen arcos dorados, los nuestros son de ORO". Claro que traducido pierde un poco la gracia...

viernes, 4 de enero de 2013

Fleiz 201333333


Portense bien o mal, es indiferente.
Viajen. Sean felices. Hospitalarios. Confiados.
Tranquilos y receptivos. Tolerantes.
Que sea un 2013 lleno de alegría y plegarias.
Abundancia y trabajo ante todo!!