jueves, 13 de julio de 2023

Cat lovers

La dualidad es algo que atraviesa a todo el universo. 
Lo rodea, lo penetra, lo hace uno en el Cosmos.La dualidad es dualismo, es dos, dos caras, como Janos.
Dualidad que no es binario pero si lo es.
Porque uno es uno y uno más uno es dos. 
Como el Ying y el Yang, el mundo está partido al medio, en dos partes. 
El sistema es bipartidista, deben votar por alguno de los dos. 
Yo voté por Kodos. 
Y todo este rollo para decir que el mundo se divide, entre otros tantos antagonismos bipartitos, entre los que aman a los perros y los que no, que por lo general son amantes de los perros. 


¿Se puede amar a los dos? Yo creo que se puede querer a ambos, tener simpatía, no odiar... pero en el fondo de nuestro corazón amamos más a uno de los dos bichos.

Desde tiempos antiguos el ser humano a tendido lazos afectivos con determinados animales. Algunos de ellos, como los caballos o las aves mantienen una relación cordial, casi amistosa. El perro es el ladero fiel por excelencia del hombre, pero el gato... el gato ofrece un tipo de relación más enfermiza, más tóxica y neurótica. 

Todo aquel que haya tenido un gato sabe de lo que estoy hablando. Los gatos son solitarios, independientes, altaneros y sobre todo díscolos. Si hay una palabra que los define es esa: ser ariscos. 
Como dueños les chupamos un huevo. No velan por nuestra seguridad o salud como lo haría un perro. Pero sin embargo, ahí se quedan. Pueden ir y venir o ser cien por ciento domésticos y vivir toda su vida pegados a vos, pero siempre van a mantener cierta distancia. Ellos se acercan cuando ellos quieren y no cuando vos requerís de su afecto. Pueden sanarte un dolor de panza con solo acostarse arriba tuyo, pero lo tienen que hacer ellos, por motus propio. Entiendo que hay mucha gente que no tiene paciencia para estos extraños animalitos. Pero creanme cuando les digo que tener un gato es lo más lindo que hay. Y sobre todo una gata. 
Existe al preeminentemente femenino en todo el asunto gateril. Casi como un capricho de dama, todo lo relacionado con el mundo felino tiene un asociación, en el constructo social, con el mundo de lo femenino. 
Gato, gata, luna, mujer, noche, capricho, erotismo, seducción, comodidad, independencia, ronroneo, histeriqueo, mañosidad, jugueteo, laxitud, complejidad.
En cambio el perro se asocia más al mundo de lo masculino como el día, el sol, la fuerza, el ladrido, los musculos, la aventura, el dinamismo, lo temerario, lo directo, lo dependiente, lo simple. 
Ya no queda mucho por decir. Yo amo a los gatos desde mi primera gata que estuvo desde mi diez años hasta mis 23, marcando toda una época de mi vida. Siempre me pareció un animal complejo y a veces un poco insoportable, pero no cambiaria un gato por ningún otro bicharraco del ecosistema. 
Los gatos son simplemente lo mejor que hay.

No hay comentarios: