miércoles, 20 de enero de 2021

La ciencia ficción y el humor

Existen diferentes tipos de ciencia ficción: dura, blanda, cyberpunk, steampunk, hay utopías, distopías, ucronías, y podemos seguir con una larga lista. Pero más allá de géneros y subgéneros, estilos y abordajes temáticos, hay un tema que no suele abundar en el género y sobre todo que no se lo suele mencionar mucho y este es el humor. 

A lo largo de la historia de la ciencia ficción, que podríamos decir que es un género (casi) tan antiguo como la literatura misma ya que deviene de aquellas historias fantásticas que ya existían en la antigüedad. Desde La Odisea de Homero, pasando por las Historias verdaderas de Luciano de Samósata, hasta el siglo XVII con el Somnium de Johannes Kepler.  

Pero sería con el poeta francés Cyrano de Bergerac, pocos años después de aquel delirio lunar del astrónomo Kepler, que la narrativa de viajes espaciales tomaría "vuelo" y sobre todo, un sello propio, caracterizado por un uso satírico del relato. En los "Viajes a la Luna y al Sol", Cyrano narra viajes imposibles en globo hacia los astros, con un fuerte condimento, el humor. Cyrano no se toma en serio, todo es absurdo y en base a eso juega con las locuras de sus personajes. 

Medio siglo después, sería un escritor irlandés quien incurriría en el estilo de la fantasía satírica con su afamado Viajes de Gulliver. Ya sabemos como es el humor satírico inglés, bueno, a eso habría que agregarle el humor irlandés, elevado a la décima potencia. 

Luego pasaría un buen tiempo hasta que el humor y la ciencia ficción se cruzaran ya que en el siglo XIX la cosa era más solemne. Los autores estaban más cerca de las teorías evolucionistas y nadie quería quedarse atrás y menos, haciendo de eso una parodia. 

Pero en el siglo XX, la ciencia ficción ya se llamaba ciencia ficción, y el humor volvería a ser tenido en cuenta, sobre en la segunda mitad del siglo, una vez superados los horrores de la Segunda Guerra. 

Uno de los autores del que menos se esperaba que retomara el tono satírico dentro del género era un polaco que había escrito unas novelas de ciencia ficción (casi) dura, a principios de los años 50. Sería con su Diarios de las estrellas (1957) que Stanislaw Lem se convertiría en leyenda. Las historias espaciales de Ijon Tichy por el universo. Donde las historias tienen un claro tono paródico ya que al personaje le pasan cosas hilarantes y ridículas. Muy similares a algunas de las aventuras del serial Rick y Morty, por mencionar un ejemplo. 

Marciano vete a casa (Martians go home) de Fredric Brown es una novela de 1955, que ya desde el título nos adelanta de alguna manera el tono paródico de la misma. En un mundo occidental invadido por la paranoía anticomunista que personajes como Edgar Hoover o Joseph McCarthy (y avalados por el presidente Eisenhower), se daban el lujo de fomentar en una sociedad norteamericana que no paraba de consumir y hundirse cada vez más en la superficialidad de su propia mentira que era la American way of life en los años cincuenta, que a la vez se encargaban de bajar como modelo para que el resto de los países del mundo alineados (como nosotros, su patio trasero). Pero en medio de todo este embrollo y en plena guerra fría, autores como Fredric Brown escriben novelas donde se ríen de todos. En Marciano vete a casa, un escritor de ciencia ficción está bloqueado (un clásico tópico de autores bloqueados), y de repente la Tierra es invadida por unos seres verdes y chiquitos, sobre todo etéreos, que se la pasan invadiendo nuestra privacidad a toda hora y en cada momento. Esta novela es un clásico de la ciencia ficción satírica y es en verdad desopilante e imperdible. 

Poquito después vendrían novelas de Kurt Vonnegut como Las sirenas de Titán, Cuna de gato, Matadero Cinco, Desayuno de Campeones, Payasadas y demás, que se van alejando de la ciencia ficción para ser directamente paródicas.  

Finalmente, sería el inglés Douglas Adams y su saga de novelas del Autoestopista galáctico (1979), quien terminaría de afianzar la comunión de humor y ciencia ficción para siempre, con novelas cómicas, hilarantes, deudoras de lo mejor de la unión de estos géneros. Aunque el humor mas que un género sería un tono, pero bueno, se entiende...

También podrían mencionarse series y películas como Volver al futuro, Hombres de negro, Dr Who, Futurama, el mencionado Rick y Morty y muchos otros, pero de momento solo me interesaba recordar la unión literaria de la ciencia ficción con el tono humorístico. Ya que no solo hay que recordar la parte solemne y seria del género y recordar que también hablar del espacio, los viajes espaciales, viajes en el tiempo, robots que hablan, alienígenas espiando nuestras tonterías, etc, es bastante ridículo de por sí, y si bien son cosas que le interesan a la humanidad de los, al menos, últimos dos mil años pero que también es entretenimiento, aventuras, tiro lío y cosha golda! 

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