lunes, 26 de abril de 2010

Finalmente... Pink Floyd



Bueno y ahora si, señoras y señores, se acabó la joda en Camafeos escritos, ahora volvemos con bandas grosas, escritores grosos, directores grosos y pelis grosas, músicos grosos, libros grosos y hasta quizás nos animemos con algún cuadro y pintor groso.. por que Camafeos escritos es una reserva natural de arte, del bueno.

Como escribimos "camafeísticamente" hace un poco mas de un año, Pink Floyd es una excelsa banda de rock británica que tuvo sus orígenes en Londres, allá por el año '66, pero como de sus orígenes ya hablamos, pasemos a la segunda parte de la nota.
En 1973, su bajista y principal letrista de la banda, Waters, luego de la partida de Barrett, decidió que no necesitaba de la ayuda de sus tres compañeros de banda y tomó las riendas del grupo con un disco escrito y casi ideado todo por él.
El resultado sería el comienzo del fin del Pink Floyd clásico, a la vez que también de los discos mas populares, famosos y excelentes del grupo.
Hablo sobre todo del archi premiado y vendido, Dark side of the moon (1973), Wish you were here (1975) y The wall (1979).
Los tres miembros restantes serían relegados a un papel casi de músicos sesionistas, o al menos eso es lo que diría la prensa especializada.
Para mi no fué así, cualquier de los otros tres, Mason (batería), Guilmour (guitarra)y Wright (teclados), doblaba a Roger Waters en talento y virtuosismo, por ende gran parte de los arreglos y de la "musicalidad" en general de los discos de la banda se deben en gran parte al aporte para nada despreciable de estos tres elementos.
Dark side of the moon, es un de sus mejores discos y uno de los mejores discos de la historia del rock, por su calidad sonora, originalidad, mística, tapa, y demás mitos y leyendas, pero sobre todo por que es uno de esos discos que uno puede poner, poner y poner para sonar, y nunca cansan, y eso, aunque usted no lo crea, no pasa seguido.
Un mito: dícese por ejemplo, que si uno ponía el disco a partir del tercer rugido del león en la película de 1939, El mago de oz, la música se condecía con la imágen, no se, yo lo intenté pero creo que si bien no cordiné bien los tiempos, eso es mas un mito que uno cree y quiere ver realizado, que algo realmente cierto.
Cuestión que la banda sacó otro discazo en 1975, Wish you were here, aparentemente dedicado a su ex compañero loco, Syd Barrett.
Después vino el un poco intrasecendete pero gran disco, Animals (1977), basado en Rebelión en la granja del escritor inglés de ciencia-ficción política George Orwell.
En 1979 salió, hacia fin de año y década, el gran disco taquillero The wall. Un disco que revolucionaría de nuevo el rock, como lo había hecho Dark side.. con un disco nuevamente conceptual, basado en la propia experiencia de vida de Waters. Algo así como una autobiografía cantada en un disco de rock progresivo.
Ya para esa época la tensión con sobre todo Wright y Guilmour, debido a un despotismo insoportable de Waters, adelantó al poco tiempo la salida de Wright de la banda y el quiebre definitivo del grupo en su formación mas clásica.
Como dijo Lennon, el sueño había terminado.
Si bien aún saldría un disco mas con Waters, The final cut (1982), la cosa no era lo mismo, y si bien aunque The wall era un trabajo y sobre todo el capricho de una sola persona, el disco fué excelente, por la idea en sí, por el sonido y otra vez por el aporte magistral de los otros miembros, sobre todo de Guilmour.
Pero The final cut, sólo logró ser una mala copia o segunda parte de The wall, con letras casi idénticas, melodías calcadas y soporíferas, los mismos recursos de sonidos de película del disco anterior y con la única diferencia de ser un poco mas ochentoso y tratar, muy a la pasada, el tema de la guerra de Malvinas.
Waters luego intentaría disolver la banda, pero entraría en litigio con sus ex camaradas. Las cosas no saldrían bien para ninguno de los dos bandos.
Waters perdería el juico (no la razón), y debería tener que bancarse que sus ex compañeros se quedaran con el nombre de la banda y pudieran seguir lucrando.
Él empezaría entonces una carrera solista que empezaría bien, pero que no tardaría en disolverse en una triste promesa y nada mas. Waters saldría de gira por el mundo sólo con el sustento de los temas de Pink Floyd, sobre todo presentado o Dark side of the moon completo o The wall completo, como ahora, que probablemente venga a la Argentina, y que probablemente vaya a ver claro.
Los tres miembros restantes pareciera que se lucharon por seguir con la banda, sólo para joderlo a Waters, por que si bien en el '87 sacarían un disco, relativamente mejor que The final cut, aunque con sus buenos baches de aburrimiento, la banda no fué jamas lo que había sido. De hecho cada vez fueron tocando menos, con una mega gira en el '88 y un disco en vivo potable, Delicate sound of thunder, luego habría que esperar hasta entrados los '90s para escuchar un disco un poco mejor que el anterior, pero que sigue sin ser lo que fué, The division bell, con su respectiva gira granilocuente, bien a lo Pink Floyd desde el '73. Shows impresionantes, pantallas gigantes, escenarios inmensos llenos de decorados y títeres enormes.. en fin mucho ruido y pocas nueces.
Desde que Pink Floyd dejó de funcionar como un conjunto las cosas carecieron de sentido para ambos bandos. A los tres muchachines les faltaba la lírica ocurrente y las ideas y temáticas conceptuales de Waters.
A Waters después que sacó The wall, pareciera que se le acabaron las ideas geniales que tenía ya que nunca mas sacó un disco a la altura de los que sacó con Floyd. Entonces pareciera que Pink Floyd sifrió el mismo síndrome que The beatles ya que después de separados, ninguno pudo sacar un disco a la altura de lo que habían hecho en grandes discos como Sgt Pepper, White album o Abbey road.
Misterio misterio..
La muerte hace un par de años del tecladista Rick Wright terminó por descartar cualquier tipo de reunión de la banda original.. en fin, una historia triste, similar a la de Los beatles.
Grandes bandas, las mejores, que terminaron para el to-or.. Y bue, al menos nos quedan sus discos para escuchar...

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